Integrar los flujos de trabajo radiológicos acelera el camino hacia un mejor diagnóstico de precisión

¿Qué pasaría si se lograran conectar los flujos de trabajo, qué ventajas tendría para el paciente y para el equipo médico? Por ejemplo, mejoraría la eficiencia del servicio en un 10-20% para permitir un mayor volumen y acceso a la atención. Sin embargo, para lograr estos cambios, se requieren ciertos desafíos cuando vemos que más de un 20% de los técnicos en radiología afirman que el 23% de su trabajo es ineficiente y podría automatizarse y si revisamos las cifras, US$ 12 mil millones anuales es el costo que representan los exámenes de imagenología innecesarios repetidos y por debajo del nivel óptimo.

Las tendencias de la industria van marcando el camino y vemos como la atención virtual o la telemedicina se ha vuelto parte de nuestra vida cotidiana, sin embargo, debemos potenciar estas relaciones virtuales, trabajando de manera colaborativa, con información basada en el análisis de grandes cantidades de datos, mejorando la eficiencia con el apoyo de la IA y mejorando la productividad. Otra tendencia que vemos, es de lo que venimos hablando, la digitalización de la salud para el manejo de datos clínicos y gestiones hospitalarias, en donde la atención sea integral y no fraccionada.

Es así como vemos una tremenda oportunidad para el área de diagnóstico: la integración perfecta a lo largo de la red hospitalaria. Radiólogos y Patólogos que pueden acceder a datos de imágenes con calidad excepcional relacionados al mismo paciente; Cardiólogos que pueden contar con herramientas de visualización avanzada para tomografía y resonancia cardíaca; Oncólogos y médicos tratantes que pueden revisar informes e imágenes de radiología y patología en el contexto del paciente, el intercambio es infinito y muy productivo. Este es el significado de una solución integrada, un ambiente colaborativo y eficiente que traerá inexorablemente mejores resultados.