Gestos como limpiar el parabrisas o revisar la presión de los neumáticos se han convertido en algo automático antes de ir de vacaciones. Sin embargo, no todo el mundo ha adquirido la costumbre de revisar la iluminación del automóvil como un factor esencial de seguridad para el conductor, sus pasajeros y los usuarios de la carretera. Antes de salir de vacaciones, es muy importante revisar todas las luces del vehículo.
La mayoría de los accidentes de tráfico se producen de noche o en condiciones meteorológicas adversas, por eso la iluminación del vehículo es una prioridad. La mayoría de las personas sienten más peligro en la carretera por la noche: atenuación de los contrastes, reducción del campo visual y una distorsión en la apreciación de las distancias de seguridad... Los faros son el único equipo del vehículo que permite ver y ser visto para anticiparse mejor a la carretera y a sus posibles peligros.
La calidad de la iluminación y su simetría son fundamentales. Una lámpara que esté al final de su vida útil se deteriora más rápidamente. Si una lámpara delantera tiene poca intensidad, el conductor debería sustituirla antes de que deje de funcionar por completo. Eso también indica que el segundo faro podría apagarse en los días o semanas siguientes. Además, si los faros están mal ajustados, la visibilidad del conductor es limitada y podrían deslumbrar a otros conductores.
El destello producido por los faros mal ajustados es una fuente de estrés y accidentes. El mensaje es claro, un vehículo que no está bien señalizado en la carretera es un peligro para todos: luces diurnas, luces de posición, intermitentes y luces de freno son funciones de seguridad importantes que no se deben pasar por alto.
Para ajustar las luces o cambiar la iluminación del coche, es recomendable acudir a un profesional. Esta persona cuenta con la experiencia y las herramientas necesarias para intervenir según los procedimientos habituales. En caso de haya que cambiarlas, te asesorará sobre la iluminación más adecuada a tus hábitos de conducción. También podrá ajustar con precisión la posición y la inclinación de la óptica para obtener la máxima visibilidad sin riesgo de destellos.
Para mayor seguridad, la mayoría de los países europeos recomiendan equipar los vehículos con una caja de lámparas de repuesto homologadas. Además de cumplir las normativas locales, esta precaución es una garantía de seguridad para viajar con calma y disfrutar plenamente de las vacaciones.